Los sistemas pasivos de conservación y eficiéncia energética
Josep Maria Mas de Domus Serveis regresa al blog de Feliu para hablarnos de eficiencia energética y sistemas pasivos de conservación.
Hace meses que los titulares se los lleva la energía.
Por un lado, por el alto precio de la luz del otro, por la incertidumbre después del corte del gasoducto entre Argelia y Marruecos que ha despertado la inquietud de si llegará suficiente gas argelino este invierno por la única conexión operativa desde el desierto arcelino a Andalucía .
Este texto es sobrevolado por la cuestión energética una pregunta: ¿La manera actual de consumir electricidad y gas es la más conveniente?
En este sentido, lo primero que digo a mis clientes sobre cómo limitar las elevadas facturas energéticas actuales es lo siguiente:
"Todo euro que quieras ahorrar en energía se tiene que invertir a medio y largo plazo en los sistemas pasivos del hogar”.
El estàndar Passivhaus se diseñó como una fórmula de sostenibilidad y eficiencia en el hogar que se consigue con una construcción especializada consiguiendo la total estanqueidad de la envolvente interior, sin perjudicar la calidad del aire, la luz y el confort.
Así, al diseñar hay que hacer hincapié en las renovaciones del aire para higienizar el ambiente, y paralelamente procurar de elementos mecánicos de tratamiento del aire que limpian sin perder el calor interior al intercambiarla con el aire nuevo del exterior.
¿De qué principios partimos?
- Orientar las aperturas y los habitaciones de acuerdo con los puntos cardinales para que elementos exteriores como el sol nos ayuden “pasivamente” a la conservación energética.
- Aplicar los materiales no transmisibles en fachadas, cubiertas y pavimentos, para eliminar las incidencias de la sonoridad y de la temperatura, son unos ejemplos de como este estándar subraya el concepto de la conservación de la energía.
Ejemplos de protección de la energía:
APERTURAS EN LA FACHADA
Los cierres y acristalamientos son el principal punto de fuga energética dentro de hogar.
En base a dicha realidad, tendremos que hacer algunas consideraciones sobre su estado de conservación y funcionalidad y si nos vale la pena invertir para amortizarlo rápidamente en energía.
- Protectores solares exteriores o vegetación natural que nos aporten frescura en verano y aislamiento en invierno.
- Cortinas interiores de menaje de las inercias térmicas (frío o calor) con materiales técnicos y de estética cuidadosa, así como mecanismos automáticos y sensores de cierre de persianas en condiciones climatológicas adversas.
- Acristalamiento adecuado, grosores de las láminas, cámara de aire o gases técnicos, filtros solares o de radiaciones, transmisibilidad térmica.
- Estanqueidad a medida que pase el tiempo. Mantenimiento de las juntas y comprobaciones de escapes de aire interior-exterior o puentes térmicos.
- Material con el cual está hecha (Metal, Aluminio, PVC, Madera). Observáis que he puesto un degradado de más a menos transmisibilidad térmica en los materiales.
Con una cámara térmica se pueden observar las diferencias de temperaturas en estos puntos que son los principales causantes de la pérdida de energía y, por tanto, en mi opinión, un punto donde invertir el dinero.
En DOMUS Serveis diseñan instalaciones e instalan maquinaria de climatización. Por eso, quizás veis un contrasentido “recomendar” cierres del hogar, pero hay que entender al cliente y servirle.
TRATAMIENTO DE PAREDES y TECHOS
Dependiendo de si nuestro hogar está expuesto a un viento o a cuatro vientos (entendiendo como “viento” la parte de la fachada exterior de nuestra vivienda, expuesta a la climatología y afectaciones térmicas exteriores), tendremos que valorar la viabilidad de una opción o de otra.
En las reformas integrales podremos invertir en mayor o menor medida y en otros casos, podremos valorar nuestra compra de vivienda nueva, teniendo en consideración estos factores.
Así mismo con los techos, cubiertas y alturas de la planta.
A cada altura tendremos una afectación diferente, los materiales con los cuales protegemos nuestros interiores y conservación energética serán diferentes.
Por eso la figura del asesor energético en los procesos de decisión, sean de compra, reforma o de instalaciones, es vital y obligada prácticamente hoy en día. En todos los casos nos encontraremos con la necesidad de climatizar y hacer confortable nuestro hogar. Entonces habremos de valorar qué decisión económica y medioambiental nos conviene más.
En este sentido es recomendable apostar por:
- Trasdosados interiores de placas de cartón y yeso, aislamientos térmicos y acústicos que nos permitan protecciones justas, calculadas a las características de demanda y uso de la vivienda.
- Elevación de Pavimentos flotantes ligeros con formación de cámara de aire en las azoteas y cubiertas de los edificios, para generar una protección de los elementos constructivos originales de cerámicas o pétreos, para “romper” la continuidad y puentes térmicos que almacenamos durante el día y con el contraste de la noche los envejecen a la vez que provocan los efectos de transmisibilidad entre el exterior y el interior sin la técnica ancestral que si entendía como funcionaba este mecanismo de “carga y descarga” energética natural.
- Aplacados y revestimientos de fachadas con nuevos sistemas ligeros de materiales muy técnicos con unas características y calidades a la impermeabilización, aislamiento y estética totalmente contrastados y de gran eficiencia y relación económica-resultado.
HÁBITOS EN EL HOGAR
Recuerdo mi niñez, como en casa, mi abuela en invierno llevaba una bata y jersey para ir por dentro de ella, cómo se calentaba el interior de la cama con un brasero y cómo únicamente se abrían las ventanas por las mañanas para ventilar… Así como en verano, pasar la “tarde a la fresca” de la calle eran habituales.
Algunos de los buenos hábitos que tendríamos que tener en cuenta para combatir los malos hábitos de hoy:
- Atemperar sectorizadamente el hogar y cerrar manualmente o automáticamente la demanda de consumo en las zonas de la vivienda cuando no hacemos uso.
- Bajar o subir las persianas a partir de ciertas condiciones exteriores
- Procurarnos sistemas de luz confortable, así como, diseños interiores y colores que nos hagan agradable “cerrarnos” dentro de casa, ponernos ropa de abrigo confortable
- Modificar los hábitos de comidas en las épocas verano e invierno, conservar nuestra propia energía interior del cuerpo, graduar los sistemas de calentamiento de agua caliente sanitaria y proteger los espacios de baño de forma especial.
En definitiva, el camino es la frugalidad energética y ser conscientes para cambiar nuestros malos hábitos.
¡Bienvenidos al siglo del conocimiento energético!
En este artículo, en ningún momento he hablado de máquinas o ahorros en letras energéticas o kilovatios. Hay que ser accesibles a todo el mundo manteniendo unas condiciones de vida y usabilidad de nuestras viviendas respetuosas con nuestro bolsillo y el medio ambiente del cual todos/as formamos parte.
Josep Maria Mas, CEO de DOMUS energía